Las capitulaciones en el matrimonio, son importantes
Unos de los momentos que produce gran indecisión a la hora de formalizar nuestra relación (del noviazgo al matrimonio) son las capitulaciones, no estamos totalmente seguros de proponérselas a nuestra pareja, pero cuando existe total confianza y seguridad no debe reinar la duda.
Este documento es un contrato donde se estipulan todos y cada uno de los bienes de la pareja obtenidos antes del matrimonio. Este tipo de contrato, por lo general está presente cuando alguno de los miembros de la pareja tiene hijos de otras relaciones anteriores.
Si lo vemos de manera legal, es una buena opción que se le puede garantizar a esa parte de la familia, la cual no se quiere o debe desamparar. Por otra parte esta opción pre-nupcial es un seguro que se le coloca a los bienes que fueron obtenidos de forma generacional (padre e hijo). Las condiciones legales de este contrato, van a depender de las leyes de cada país, pero básicamente el fin de este mecanismo, es el resguardo de los bienes.
Al plantearse casarse bajo estas condiciones, debemos explicar bien a nuestra pareja, que este formalismo no significa que se dude de ella, por el contrario lo más sano es que al tener redactado este documento, sea revisado por el abogado de la afectada, el cual deberá revisar y dar sus puntos de vista y observaciones, si son necesarias.
Muchas veces el planteamiento de este mecanismo legal genera dudas sobre el casamiento, pero su en elaboración no necesariamente se establece el desamparo del cónyuge, los lineamientos y beneficios de la sociedad conyugal deberán estar estipuladas en este contrato, por eso es recomendable el asesoramiento de un abogado, el cual te explicara todo lo concerniente a esta modalidad de separación de bienes.
Recuerda que cualquier duda que tengas sobre el mecanismo de las capitulaciones, debes consultar a tu abogado. Cada país tiene un sistema de leyes y este mecanismo legal puede variar según el país, así no tendrás alguna duda de lo que estas firmado y podrás casarte sin ningún problema y llevar la vida que tanto has deseado… .
Finalidades
En resumen, las capitulaciones matrimoniales tienen un objetivo básico:
Determinar con exactitud cuales son los bienes que aportarán los futuros cónyuges o compañeros permanentes a la sociedad marital que se está formando entre ellos.
Establecer los aportes que deseen hacer, a presente o a futuro, con ocasión del matrimonio o de la unión marital de hecho.
Delimitar qué privilegios de carácter patrimonial o económico se hacen los futuros esposos o cónyuges, en la actualidad o hacia futuro.
Definir las potestades que se otorgan los futuros esposos o conyugues para el manejo o administración de los bienes.
Como podemos ver si una pareja decide celebrar capitulaciones y dejar de manera anticipada establecida la manera como desean administrar los bienes de la futura sociedad que se forme entre ellos, se está ahorrando un largo proceso, en el evento en que las cosas del amor no funcionen y decidan terminar su unión.
En cuanto a los Bienes
En efecto, si la pareja no desea hacer las capitulaciones, es decir, no definen anticipadamente la manera como van a manejar sus finanzas durante la vigencia de su unión, la sociedad conyugal que se formará por el hecho de matrimonio o la posible sociedad patrimonial que se declarará por la unión marital de hecho deberán regirse de conformidad con las disposiciones legales vigentes.
En estas circunstancias, si una pareja decide contraer matrimonio civil o religioso, deberá tener en cuenta que la sociedad conyugal que se formará por el hecho de haber contraído matrimonio se regirá por las normas contenidas en el Código Civil y que los bienes que formarán parte de dicha sociedad conyugal son básicamente los siguientes:
Todos los salarios de ambos cónyuges durante la vigencia de la sociedad conyugal.
Todos los frutos, pensiones, intereses y bienes propios o sociales.
Todos los dineros que cualquiera de los cónyuges aporten al matrimonio o que adquieran durante este.
Todos los bienes muebles o cosas fungibles que cualquiera de los cónyuges aporten al matrimonio o que adquieran en este.
De la misma manera, los compañeros permanentes deberán tener en cuenta que al formarse una sociedad patrimonial entre ellos, los bienes que harán parte de la misma serán todos aquellos bienes adquiridos como fruto del trabajo.
Así las cosas, observamos la importancia que tiene la figura jurídica de las capitulaciones es permitirles a los futuros esposos o compañeros permanentes reglamentar con anterioridad al inicio de un matrimonio o de una unión marital de hecho cómo quieren administrar sus bienes de presente o futuro y no someterse al designio de la ley.